Las perras, al igual que las mujeres, pueden llegar a sufrir de cáncer de mama. Es más, este tipo de cáncer es de los más frecuentes en las hembras. Por eso hay que prestar mucha atención ante cualquier aparición de tumores o bultos en sus mamas.
Se debe estar preguntando en este momento, cómo puede prevenir esta enfermedad. La mejor forma de prevención, como en cualquier enfermedad es la detección temprana de los tumores, por eso hago énfasis en el cuidado y atención que debemos prestarle a nuestras mascotas, ya que ante cualquier cambio en su comportamiento o la aparición de bultitos debemos visitar inmediatamente a su médico veterinario.
En el caso de las hembras, podemos examinarle una por una con los dedos buscando alguna protuberancia. Esta revisión de las mamas, puede hacerse de vez en cuando o simplemente tocárselas mientras las bañamos.
Tenga en cuenta que las perras con este tipo de cáncer no presentan síntomas como inapetencia, o cansancio extremo, o apatía en general, por eso es tan importante revisarlas periódicamente para evitar el crecimiento de tumores cancerígenos.
Aunque los tumores pueden aparecer en cualquiera de las mamas, los dos últimos son los más afectados, y usualmente hay más de una mama involucrada. Los tamaños de estos bultos son variables, pueden medir apenas unos pocos milímetros hasta más de 15 cm. No piense que porque su animalito tiene una “pequeña bolita” en su mama, no es una cáncer maligno, el tamaño no tienen nada que ver con la malignidad o la benignidad del tumor.
Una vez detectado el tumor es muy importante que sea extirpado de inmediato, sin embargo algunos médicos optan por la quimioterapia según sea el grado de invasión del cáncer que pueda tener su mascota.