Una de las consultas más frecuentes que reciben los veterinarios está relacionada a los cuidados de sus oídos y a sus posibles enfermedades . Las orejas de los perros se caracterizan por tener su interior húmedo y calido. Un ambiente ideal para que se causen infecciones.
Debes tener presente que las orejas de los perros, lo mismo que en los seres humanos, es la parte externa de su aparato auditivo. Las mismas están formadas por cartílago que es el que le brinda su forma, esta forma varia de acuerdo a las distintas especies. Este cartílago, a su vez, se encuentra recubierto de piel, pelos y en algunos casos músculos. Si la oreja es extremadamente peluda debemos tener cuidado de que no se le formen tapones de cera u otitis. Por eso debes cortarle el pelo de la zona.
En el caso de que tu perro tenga las orejas como caídas, deberás extremar las precauciones, ya que en este tipo de oreja se suelen meter insectos, parásitos, hierbas. Esto podaría provocarle molestias y picazón, causando que se rasquen y que se lastimen, causando una otitis infecciosa.
Si piensas irte de vacaciones con tu mascota a la playa es aconsejable que antes los lleves al veterinario, para controlar sus orejas y cortarle os pelos. Cuando regreses del viaje inspecciona para que no haya quedado rastros de arena en ellos.
La limpieza que le hagamos deberá ser en la zona en la que podamos acceder mediante un algodón, nunca usando ningún palillo ni nada que pueda lastimarlos. Lo único que haremos entonces es empujar la cera hacia adentro y esto puede empeorar el cuadro.
Si el tapón de cera es duro o muy grande el veterinario te suministrará algunas gotas específicas para una solución.
Existen diferentes síntomas que te demostraran que tu perro tiene problemas en sus oídos. El más característico es que sacudan su cabeza de un lado a otro. También debes estar atento a su andar, si ves que se bambolea o tropieza puede ser porque está perdiendo el equilibrio, causado por problemas en sus oídos.