¿Cómo darle de comer a un perro con megaesófago?

es un problema que puede causar graves molestias a nuestra mascota en el momento de comer

Conocemos el esófago como un tubo muscular que se encarga de conectar la faringe con el estómago, siendo de gran ayuda para poder trasportar cada uno de los alimentos realizando unos movimientos llamados peristálticos.

Existen causas que pueden llegar a afectar cada uno de estos movimientos y que provocan lo que normalmente conocemos con el nombre de megaesófago.

Megaesófago en perros

Sintomas del megaesofago en perros

Teniendo en cuenta que este es un problema que puede causar graves molestias a nuestra mascota en el momento de comer, es necesario saber cómo podemos alimentarlo de la manera más indicada. Es por este motivo, que traemos toda la información necesaria para saber cómo hacerlo.

Antes de saber cómo alimentar correctamente a un perro que tiene este problema, tenemos que saber que es el megaesófago. Con esto nos referimos a que hay una dilatación patológica y de forma general del esófago.

Esto es algo que ocurre cuando existe un descenso en la motilidad y recibe el nombre de hipomotilidad.

Esto es un inconveniente que puede llegar a ser congénito o en su diferencia adquirido. El primero que mencionamos es un problema que afecta a los cachorros y por lo general  ocurre en el momento en que empiezan a probar alimentos sólidos.

Por otro lado y en el segundo caso, es capaz de afectar a los perros en su etapa adulta y puede ocurrir por distintos motivos, bien sea porque en el área se encuentra un objeto extraño o por una debilidad en los músculos.

Síntomas del megaesófago en perros

Los síntomas principales del megaesófago en los perros, es el  regurgitar los alimentos o también los líquidos, llegando a ser tan grave, que puede causar una neumonía por la aspiración.

Perder peso también forma parte de los síntomas de esta enfermedad, como también lo son los intentos de tragar de una forma constante. Un perro con megaesófago puede llegar a regurgitar después de que han pasado varias horas de la ingesta de la comida.

Lo fundamental es saber el motivo de la aparición del megaesófago, para poder suministrar de manera eficaz un tratamiento. Pero mientras eso sucede, es primordial  tener el conocimiento necesario para alimentarlo correctamente.

Esta es una enfermedad que hace difícil la ingesta de  los alimentos a causa de la regurgitación, provocando que el cuerpo de nuestro perro no absorba los nutrientes correctamente.

Diagnóstico y tratamiento del megaesófago en perros

Esta es una enfermedad que puede ser diagnosticada a traves de una radiografia o con la ayuda de un contraste de bario

Cuando observemos que nuestro perro tiene alguno de los síntomas que ya hemos mencionado, es importante que lo llevemos a  un veterinario lo más rápidamente posible.

Esta es una enfermedad que puede ser diagnosticada a través de una radiografía o con la ayuda de un contraste de bario. Así mismo, también será necesario saber si el perro sufre neumonía y dependiendo de cuál sea la causa del megaesófago, se recomendará un tratamiento u otro.

Si el perro tiene neumonía, lo recomendable será  utilizar antibióticos.

Aquellos cachorros que han nacido con megaesófago congénito, pueden llevar una vida normal. Aparte del tratamiento que nos indique el especialista, es necesario lograr que nuestro perro reciba todos los nutrientes necesarios.

Para eso tenemos que seguir una serie de indicaciones para saber cómo alimentarlo correctamente.

  • Hay perros que tienen problemas para ingerir alimentos sólidos y hay otros que no tienen la capacidad de consumir líquidos. Por lo tanto, es importante probar la textura que sea más cómoda para nuestro perro.
  • Es necesario que el comedero y el bebedero se encuentren colocados en un lugar alto, ya que cuando el esófago se encuentra estirado se puede sacar provecho de la gravedad para que los alimentos pasen de la boca al estómago.
  • Después de que el perro haya comido, se recomienda que permanezca en posición vertical durante unos 15 o 30 minutos para que la comida pueda llegar correctamente al estómago.
  • Las raciones de comida se deben repartir en tres o cuatro tomas, para que el perro pueda consumir pequeñas cantidades de comida más veces al día.

Sé el primero en comentar

Deja tu comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

*

*

  1. Responsable de los datos: Miguel Ángel Gatón
  2. Finalidad de los datos: Controlar el SPAM, gestión de comentarios.
  3. Legitimación: Tu consentimiento
  4. Comunicación de los datos: No se comunicarán los datos a terceros salvo por obligación legal.
  5. Almacenamiento de los datos: Base de datos alojada en Occentus Networks (UE)
  6. Derechos: En cualquier momento puedes limitar, recuperar y borrar tu información.