El olfato del perro es uno de sus sentidos más desarrollados. Conocerlo es importante para darnos cuenta de que es una parte muy importante de su forma de ser. Ellos reconocen muchas cosas mediante el olfato, mientras que nosotros utilizamos mucho más otros sentidos, como la vista. Así que podemos comparar su olfato con el nuestro para hacernos una idea de lo que significa para ellos.
Los estudios que han hecho hasta ahora solamente son estimaciones sobre lo que puede ser el olfato del perro a la hora de percibir el ambiente que los rodea, y también sobre su comparación con el olfato de los humanos, que es bastante menos potente. Con esto podemos hacernos una idea de todo lo que ellos perciben y nosotros pasamos por alto.
El olfato canino tiene 50 veces más receptores que el humano, frente a 50 millones de células olfativas que tenemos los humanos, los perros pueden tener 200 o 300 millones. Otra peculiaridad de su olfato es que el aire inhalado y exhalado no se mezclan, y por eso pueden diferenciar mucho más rápidamente lo que huelen del exterior, algo que a nosotros no nos pasa.
Tienen un sistema muy desarrollado, y sin duda este suele ser el sentido más importante en ellos. No obstante, por la selección genética también hay perros que lo tienen mucho más entrenado y desarrollado que otros, como las razas de caza, que han sido entrenadas y seleccionadas durante siglos para tener esta característica más desarrollada.
Sea como sea, los perros cuentan con un instinto olfativo muy fuerte. Una de las cosas que debemos hacer con ellos es utilizarlo para que lo entrenen un poco, algo que además les ayudará a desarrollar su inteligencia y sus habilidades. Hacer juegos de rastreo es una buena forma de ayudarles en este sentido, escondiendo cosas y premios para que los encuentren.