Cuando estamos pensando en traer un cachorro a casa porque lo hemos adoptado, hay que tener en cuenta unos cuantos cuidados básicos, ya que serán muy importantes con vistas a su futuro. Por un lado están los cuidados básicos de salud y por otro los cuidados educativos, ya que cuando son cachorros es cuando más aprenden y se forma su carácter.
Los cuidados básicos de los perros cachorros están orientados a cuidarlos en esta etapa y a que se desarrollen plenamente. Son sus dueños los encargados de cuidarlos de la mejor manera durante sus primeros años, que son etapas delicadas en donde debemos tener en cuenta sus cuidados específicos.
Antes de la llegada del perro
Antes de que llegue el cachorro ya debemos tener el kit de bienvenida preparado en casa, porque va a necesitar sus accesorios y cosas para estar a gusto en casa. Una cama adecuada a su tamaño que podemos comprar con vistas a su crecimiento, una manta para que además no pase frío. Comedero y bebedero que pueda utilizar fácilmente, algún juguete que le resulte interesante y correa o collar para cuando comencemos a sacarlo a la calle y habituarlo a los paseos. En principio no necesitaremos mucho más para acoger un perro pequeño en casa.
Higiene y aseo del perro
El perro no se debe bañar hasta que sus vacunas estén al día. En ese momento ya estará preparado para darse su primer baño, aunque igualmente debemos secarlo bien con secador tras el baño para que no coja frío. Es importante que antes no lo bañemos o pueden enfermar. En caso de que se manche utilizaremos simplemente unas toallitas para quitarle la suciedad. Además, mientras no tiene las vacunas el perro no puede salir a la calle, por lo que podemos ir acostumbrándolo a hacer sus deposiciones en un arenero como el de los gatos, que igualmente sirve para perros pequeños.
Alimentación del cachorro
La alimentación del cachorro es fundamental para su correcto crecimiento. De un déficit en su alimentación pueden surgir todo tipo de problemas en la etapa adulta, así que es importante hacerse con un pienso de calidad y que sea adecuado para un cachorro. Este pienso suele tener muchos nutrientes y además ser más tierno y pequeño, para que los cachorros puedan comerlo con facilidad. Nunca se debe escatimar en la alimentación del perro cachorro. Además, es mejor no cambiar el alimento o añadir de un día para otro comida de casa, ya que esto puede descomponer al perro.
Paseo del perro
El cachorro nunca debe salir a la calle hasta que no haya completado las primeras vacunas necesarias para su sistema inmune. De lo contrario lo estaremos exponiendo a muchas enfermedades que pueden acabar rápidamente con su vida siendo un cachorro. En esta etapa incluso una fuerte diarrea puede acabar con la muerte en un cachorro, por lo que debemos tomar siempre todas las precauciones que estén en nuestra mano. También es mejor dejar el calzado fuera de la zona donde está el perro, ya que virus como puede ser el parvovirus pueden transportarse en el calzado. Si hay otros perros en casa, estos deben tener siempre todas las vacunas al día, para evitar que contraigan enfermedades que puedan transmitir a los cachorros. También es importante que se encuentren desparasitados y tengan las pipetas en épocas en las que hay pulgas y garrapatas.
Juego y educación
El juego y la educación siempre van de la mano en los cachorros. Aprenden jugando y a esta edad no hace falta estar pendientes de darles demasiadas pautas. En el día a día veremos cómo se relacionan y podremos ir corrigiéndolos poco a poco. Si tenemos algún animal adulto en casa es muy interesante ver cómo estos enseñan a los pequeños, corrigiendo comportamientos y jugando con ellos, de forma que ambos aprenden. Siempre es muy sano que en una casa con un cachorro tengamos un perro adulto que pueda relacionarse con él y ayudarle a aprender comportamientos básicos.