La anemia es una enfermedad que pueden padecer muchos animales, además de los seres humanos. Caracterizada por la disminución en el número o tamaño de los glóbulos rojos presentes en la sangre, provoca una serie de síntomas que hacen que la persona o animal afectado se canse con más facilidad, e incluso que se muestre apático o triste.
Si a tu amigo se la han diagnosticado hace poco, te vamos a explicar cómo cuidar a un perro con anemia.
¿Por qué mi perro tiene anemia?
La deficiencia de glóbulos rojos puede ser producida por causas muy diversas. Algunas de ellas son:
- Como consecuencia de la picadura de garrapatas y/o pulgas.
- Destrucción de los glóbulos rojos por los anticuerpos.
- Reacción a determinados medicamentos.
- Padecimiento de insuficiencia renal.
- Por deficiencia de hierro.
- Pérdidas de sangre por traumatismos, úlceras o tumores.
- Enfermedades infecciosas transmitidas por garrapatas (p. ej., ehrlichiosis o babesiosis).
- Déficit de vitaminas B12 o ácido fólico y algunas condiciones genéticas.
El veterinario identificará si es una anemia regenerativa (el cuerpo intenta producir más glóbulos rojos) o no regenerativa (la médula ósea no produce los suficientes). Esta distinción guía el tratamiento.
Síntomas, diagnóstico y tratamiento básico
Además del cansancio, vigila mucosas pálidas (encías, párpados), intolerancia al ejercicio, falta de apetito, taquicardia o respiración acelerada; en anemias hemolíticas puede aparecer ictericia u orina oscura.

Para confirmar, el veterinario realiza un hemograma y evalúa el hematocrito: en general, valores alrededor del 40–60% se consideran normales y por debajo del 30% suele indicarse anemia. También puede solicitar reticulocitos, frotis sanguíneo, análisis de orina y heces, y, según el caso, radiografías o ecografía.
El tratamiento depende de la causa: en pérdida de sangre puede requerirse transfusión; ante parásitos, desparasitación; si hay enfermedad crónica o tumores, tratamiento específico; en anemias inmunomediadas suelen emplearse fármacos inmunosupresores. Siempre sigue las indicaciones veterinarias.
Cuidar de un perro con anemia
Alimentación
Es muy importante darle una alimentación de calidad, sin cereales ni derivados. Una opción muy recomendable es darle BARF, que es comida natural cruda (aunque las vísceras y los pescados se deben de hervir, para que el alimento quede totalmente libre de posibles parásitos o huevos). Pero si no te quieres complicar, basta con que le des un pienso premium, que tenga un mínimo de 60% de proteína de origen animal.
Refuerza la dieta con hierro, proteínas y vitaminas del grupo B (B12 y ácido fólico) y apoya la absorción con vitamina C. Son buenas opciones bien cocinadas y en raciones adecuadas: vísceras (hígado, corazón), carnes rojas, huevo, pescado azul (sardinas/bonito), y de forma puntual almejas o berberechos cocidos sin sal. Evita mezclar en la misma toma pienso y crudo si tu perro no lo tolera y consulta siempre con tu veterinario sobre suplementación.
Mantenlo protegido de los parásitos
Debes de hacerle tratamientos insecticidas (ya sea poniéndole una pipeta, un collar o pulverizándolo con spray) para mantener a las pulgas y a las garrapatas lejos de él. Así evitarás que su situación empeore.
Compleméntalo con limpieza del entorno, revisión periódica del pelaje tras paseos y un plan de desparasitación ajustado a la zona y estilo de vida.
Dale el medicamento prescrito por el veterinario
Es importante que, si el profesional le ha dado un medicamento, se lo des.
- Pastilla: Si se trata de una pastilla, puedes engañar a tu perro introduciéndola dentro de una salchicha, por ejemplo; pero si aún así no se la traga, habrá que optar por abrirle la boca, colocarle el medicamento dentro, cerca de la garganta, cerrarle la boca, y mantenerla así hasta que se la trague.
- Jarabe: puedes mezclárselo con su comida favorita.
Añade pautas de adherencia: administra a la misma hora, no interrumpas el plan sin consulta y no automediques con fármacos humanos.
Medidas de soporte y prevención
Procura reposo en los días de fatiga, agua fresca, ambiente tranquilo y control del estrés. Programa chequeos y analíticas cuando lo indique tu veterinario, especialmente si hay enfermedades crónicas.

Esperamos que estos consejos te sean de utilidad para cuidar de tu mejor amigo peludo ..
Ante cualquier señal compatible con anemia, actúa rápido: consulta, diagnostica y aplica los cuidados y la dieta adecuados. Con un manejo temprano, antiparasitarios al día y una nutrición bien planificada, la mayoría de perros recuperan su energía y calidad de vida.