El Teckel es una de las razas caninas más llamativas, gracias en gran parte a su gracioso aspecto, del cual destaca la longitud de su espalda unida al corto tamaño de sus patas. Su cuerpo alargado suele dar lugar a un sinfín de bromas y comparaciones; no obstante, hay muchos detalles que probablemente desconocemos sobre este perro. En este artículo recogemos algunas curiosidades acerca del mismo.
1. Aunque es muy conocido por el apodo de “perro salchicha”, su verdadero nombre es el de Dackel, Dachshund o Teckel.
2. Debe la forma de su espalda a una mutación genética denominada Bassetismo, que hace que sus extremidades sean muy pequeñas en relación al resto del cuerpo.
3. Hay tres tamaños de Teckel: estándar (circunferencia corporal de 35 cm), miniatura (30 cm) y kaninchen (menos de 30 cm). Además, su pelo puede ser corto o largo.
4. El sobrepeso puede dañar su salud en mayor medida que la de otras razas, dada la forma de su columna. Es fundamental que pasee lo suficiente y mantenga una dieta equilibrada baja en grasas.
5. Posee un extraordinario olfato, por lo que este perro es un estupendo rastreador. Junto a su tenacidad, esto hace que pueda escaparse fácilmente tras el rastro de algún olor.
6. Su espalda es muy sensible y susceptible de sufrir daños, y es que su espina dorsal apenas tiene elasticidad. Por ello es fundamental que no obliguemos a nuestro Teckel a subir o bajar escaleras y no permitamos que salte grandes distancias.
7. No debemos levantarlo jamás de las axilas, ya que esto podría hacerle daño. Tendríamos que hacerlo sujetando el pecho con una mano y el trasero con otra, repartiendo la carga de su cuerpo en estas dos zonas.
8. Posee un fuerte instinto cazador, debido a su pasado como cazador de tejones y pequeños roedores. Por ello se mantienen siempre alerta y nos avisan ante cualquier mínimo ruido que ocurra a su alrededor.