Hoy concluimos una serie de artículos dedicados al estudio de un aspecto crucial que afecta el bienestar de nuestros fieles compañeros de cuatro patas: el estrés en los perros. Este complejo fenómeno influye directamente en la calidad de vida de nuestras mascotas. En esta última entrega, abordaremos uno de los principales desencadenantes del estrés en los perros: los humanos. Es importante tomar conciencia de cómo nuestras emociones y conductas pueden impactar en nuestros animales. Agradezco a todos los expertos que han colaborado y enriquecido esta serie: Javi González de Canibus Adiestramiento Cognitivo, Ramón Arredondo de Adiestra-Dog, Ana Hernández del Refugio El Buen Amigo, Silvia Beseran de GEDVA, Sandra Ferrer y Marcos Mendoza.
¿Por qué los humanos somos una de las principales fuentes de estrés para los perros?
Para quienes convivimos con perros, resulta indispensable reconocer que nuestras emociones y comportamientos impactan directamente en ellos de forma notable. Diversas investigaciones han demostrado que los perros son capaces de sincronizarse con nuestras emociones. Esto significa que un humano estresado, ansioso o deprimido puede transmitir estas emociones a su mascota sin siquiera darse cuenta. Este fenómeno, denominado «contagio emocional«, subraya la estrecha relación que hemos desarrollado con ellos a lo largo de generaciones.
Cuando los humanos no controlamos nuestro estrés y este se manifiesta de manera recurrente en nuestra vida diaria, los perros lo perciben a través de múltiples vías: tono de voz, lenguaje corporal, ritmo respiratorio y, según estudios recientes, incluso a través del olor.
De acuerdo con una investigación realizada por la Universidad de Bristol, los perros pueden detectar cambios en los compuestos orgánicos volátiles que emitimos durante situaciones estresantes. Este tipo de señales puede generar un estado emocional «pesimista» en los perros, haciéndolos interpretar su entorno como menos seguro. Este dato es crucial, ya que revela cómo el estrés humano no solo los afecta emocionalmente, sino también en su percepción del entorno.
Sincronización emocional entre humanos y perros
La relación entre humanos y perros tiene una historia de más de 15,000 años. Durante este tiempo, ambas especies han desarrollado mecanismos únicos para interpretar las emociones del otro. Por ejemplo, se ha demostrado que los perros pueden responder a tonos emocionales en nuestra voz, a nuestras expresiones faciales y a cambios en nuestro lenguaje corporal.
Un estudio realizado por Lina Roth en Suecia ha demostrado que los niveles de cortisol, la hormona del estrés, están sincronizados entre perros y sus dueños. Este hallazgo es significativo porque muestra cómo el estrés crónico en humanos puede afectar directamente a nuestras mascotas. Roth también halló que esta sincronización es más alta en perras, posiblemente debido a factores hormonales.
Además, Paula Calvo, investigadora de la Cátedra Fundación Affinity Animales y Salud de la UAB, señala que eventos como mudanzas, la llegada de un bebé o problemas laborales son factores que incrementan los niveles de estrés en los humanos, afectando negativamente a sus animales. Este «contagio emocional» recalca la importancia de manejar nuestras emociones de manera efectiva para proteger a nuestros compañeros peludos.
Curiosamente, investigaciones recientes también han revelado que la sincronización entre perros y humanos no es exclusiva del estrés. Emociones positivas como la felicidad también son compartidas, lo que refuerza la importancia de mantener una relación saludable y equilibrada con nuestras mascotas.
Impacto del estrés humano en la salud y el comportamiento de los perros
El efecto del estrés humano en los perros no se limita a su estado emocional. También puede tener consecuencias físicas y comportamentales. Es común observar problemas como:
- Ladridos excesivos: En situaciones de estrés, los perros pueden volverse más vocales como una forma de expresar su ansiedad.
- Conductas destructivas: Masticar muebles o rascar puertas son comportamientos típicos en perros que se sienten inseguros.
- Pérdida de apetito: El estrés puede alterar su sistema digestivo, llevando a problemas como diarrea o vómitos.
- Enfermedades físicas: Los altos niveles de estrés prolongado disminuyen la capacidad del sistema inmunológico del perro, haciéndolo más susceptible a infecciones.
Además, el estrés también afecta la capacidad de aprendizaje de los perros. Por ejemplo, un estudio liderado por Nicola Rooney encontró que los perros expuestos al olor del estrés humano mostraron menor disposición para explorar su entorno. Este estado emocional «pesimista» limita su capacidad de adaptarse a nuevas situaciones o aprender comandos.
Cómo mitigar el estrés humano en nuestros perros
Mitigar el impacto del estrés causado por humanos en los perros requiere de un enfoque integral. Aquí tienes algunas estrategias basadas en investigaciones recientes:
- Controlar nuestras emociones: Aprender a manejar nuestro estrés es clave para evitar transmitirlo a nuestras mascotas. Técnicas como la meditación o el mindfulness pueden resultar útiles.
- Ofrecer una rutina estable: Los perros prosperan en un entorno predecible. Asegúrate de mantener horarios consistentes para paseos, comidas y actividades.
- Proporcionar ejercicio físico: Actividades como el flyball no solo son una excelente fuente de ejercicio, sino que también fomentan la conexión entre tú y tu perro.
- Uso de feromonas: Las feromonas sintéticas han demostrado ser efectivas para reducir la ansiedad en situaciones específicas, como visitas al veterinario o mudanzas.
Además, fomentar un ambiente positivo mediante caricias, palabras de aliento y juegos interactivos puede marcar una gran diferencia en el bienestar emocional de tu perro. También puedes explorar otros recursos en nuestro artículo sobre los beneficios del ejercicio físico para las mascotas.
La calidad de vida de nuestros perros depende en gran medida de cómo manejemos nuestras emociones y comportamientos alrededor de ellos. Adoptar prácticas saludables y prestar atención a sus señales puede garantizar una relación armoniosa y feliz para ambos.
Es una pena que poca gente sepa realmente sobre esto, gracias por todo lo que explicas, es interesantisimo y tienes toda la razón.
Muchas gracias Iris. Si tienes alguna pregunta o curiosidad que te gustaria saber, dímelo que estaré encantado de responderte.
Un saludo y mucho animo!!!