Leyendas populares sobre los perros

Perro negro en el campo.

Hace siglos que el perro comparte su historia con el hombre, por lo que no es de extrañar que hayan surgido, a lo largo de los años, interesantes leyendas populares en torno a su figura. En ellas encontramos todo tipo de magia, fantasía e incluso detalles tenebrosos. A continuación hablamos sobre algunas de las más conocidas.

La leyenda del perro y el hombre

Según este mito, los hombres y los animales vivían juntos en la tierra, hasta que Dios comunicó a todos que había llegado la hora de separarse. Abrió unas grietas en el suelo y explicó que cada uno debía quedarse en la zona donde quisiera vivir para siempre. Cuando el suelo comenzó a temblar, los animales empezaron a formar grupos entre ellos.

Por su parte, el perro, que se encontraba en el lado contrario al hombre, dio un gran salto arriesgando su vida para situarse junto a él, ya que le consideraba su fiel amigo. Desde entonces, el ser humano se encuentra emocionalmente ligado al perro y su relación es de amistad incondicional.

La leyenda del perro negro

Esta leyenda se sitúa en Bérriz, Vizcaya. Cuenta cómo un joven, mientras repartía invitaciones para su boda, encuentra una calavera próxima al cementerio, que se le había extraviado al enterrador de la zona. Tras darle un puntapié a la calavera, a modo de juego, exclamó: “Tú también quedas invitada si puedes venir a mi boda mañana”.

Cuando se hallaba cerca de su casa encontró un perro negro, que le miraba de una manera inquietante. Seguidamente le contó a su madre lo sucedido, quien le aconsejó que fuera a la iglesia de la zona y pidiera consejo al cura inmediatamente. Éste le explicó los pasos a seguir; si llevaba al can a la boda y le daba de comer antes que al resto de los invitados, no tendría nada que temer.

Así lo hizo, a lo cual el animal respondió, al finalizar el banquete, con estas palabras: “Bien hiciste en cumplir lo que te ordenó el cura, pues si no lo hubieses hecho, hubieras sufrido un gran castigo, pues yo soy el guardián de mi amo. El me mandó venir a que tú hicieses desagravio por la falta que cometiste”. Tras esto, se fue y no volvió jamás. Desde entonces, se dice que en el País Vasco los perros continúan al lado de sus dueños tras su fallecimiento, siendo los guardianes de sus huesos.

La leyenda del Pembroke Welsh Corgi y las hadas

Cuenta la leyenda galesa que esta raza proviene de las guaridas de las hadas. Estos seres mitológicos a menudo usaban estos perros para tirar de sus carros y cabalgaban en sus lomos. La prueba está en la marca que lucen estos perros en su pelaje, provocada por las sillas de montar que utilizaban las hadas.

La leyenda del Xoloitzcuintle

Originario de México y Centroamérica, el xoloitzcuintle es un perro de peculiar aspecto con una destacable carga simbólica a sus espaldas. Su nombre proviene de Xolotl, quien según la mitología mexicana y tolteca, era el dios de la transformación, de los gemelos o lo doble, la oscuridad nocturna, lo desconocido, lo monstruoso y la muerte. Según la leyenda, el dios creó a este perro como obsequio para los hombres, con el fin de lograr la salvación de su alma.

Esta raza estaba muy ligada al mundo espiritual, pues se creía que guiaba a los fallecidos a través del inframundo, protegiéndolos y ahuyentando a los malos espíritus. Se consideraba un animal sagrado, un guardián del más allá. Además, se le atribuían poderes curativos para combatir el insomnio, la artritis y otras dolencias.


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