Cuando adoptamos un perro, sea ya adulto o todavía cachorrito, nos surgen muchas dudas sobre qué debemos hacer para que tenga una buena vida y nosotros podamos estar tranquilos disfrutando de su compañía. Esta preocupación es normal, significa que tu perro estará en manos de alguien que le prestará la atención necesaria. A continuación, 4 tips que te harán todo más fácil al comienzo de vuestra aventura juntos.
El papeleo
Probablemente te preocupe tener todo en orden en este aspecto. Es un paso que sí o sí debemos hacer correctamente. Todo el mundo sabe que nuestros amigos perrunos deben tener un chip y estar debidamente identificados con nuestros datos para que podamos encontrarlo muy rápido si se pierde.
Sin embargo, lo que no todo el mundo tiene en cuenta, y es también muy importante, es el asunto de los seguros para perros. Es completamente recomendable fundamentalmente por dos razones. La primera es la responsabilidad civil. Especialmente si nuestro perro es revoltoso o incluso un poco violento, ante la ley seremos nosotros quienes respondamos de cualquier daño que pueda causar. La segunda razón son las visitas al veterinario. Desgraciadamente hay perritos que deben acudir mucho al veterinario. Como sabemos, estas visitas pueden ser un gasto difícil de asumir cuando no las tenemos adecuadamente previstas.
Por estas y otras razones es tan importante que tengamos las espaldas bien cubiertas ante cualquier situación, por el bien de nuestra mascota y el nuestro.
Tenerlo todo preparado
Antes de que nuestro nuevo compañero llegue a casa, debemos tener varias cosas previstas para que esté bien desde el primer momento y su proceso de adaptación sea lo más rápido posible.
Es normal que al principio esté nervioso, así que es muy recomendable que preparemos un lugar acotado en el que haya pocas cosas a su alcance y no las pueda destrozar. También necesitará un lugar mullido donde descansar, acorde a su tamaño. Por supuesto, debe tener un bebedero que siempre tenga agua limpia y un recipiente para la comida. Infórmate bien sobre el tipo de comida que necesita y, si viene de una protectora y es posible, dale una comida similar al principio. Prepárale también algún juguete para que pueda entretenerse. Por último, si todavía es cachorro y no puede salir a la calle, recuerda comprar empapadores.
Llévalo a que conozca a su veterinario
Venga de donde venga y sea cual sea su edad, no debes dejar de llevar a tu mascota al veterinario. Obviamente es imprescindible si todavía no ha sido vacunado y no puede salir aún a la calle. Pero también deberías hacerlo si es adulto, aunque su aspecto sea sano y venga de un lugar de plena confianza para ti.
La visita al veterinario permitirá abrirle una ficha y su primer contacto con el que será el profesional que se encargue de su salud. En la clínica pide que le realicen un primer chequeo para asegurarte de que todo está bien y quedarte con toda la tranquilidad. En ocasiones, puede ser necesario que lo desparasiten o el veterinario puede detectar algunos problemas que habrá que observar para que no se compliquen.
Todos estos serán puntos muy fáciles de llevar a cabo si sigues nuestra recomendación de contratar un seguro de veterinario para tu perro.
Rutinas estrictas
Aunque en ocasiones pueda parecer difícil y que estamos poniéndoselo difícil a nuestra mascota, es muy importante que desde el principio establezcamos horarios estrictos para las comidas y las horas de paseo para hacer sus necesidades. Nuestro nuevo amigo se acostumbrará muy rápido y todo será más fácil para nosotros y para él.