Si vas a tener un perro o ya tienes uno, sabemos ciertamente que quieres saber cómo entrenar perros y los cuidados que éstos necesitan y para empezar, es bueno que nos informemos de todo lo que podamos acerca de la raza de nuestro perro. Conocer los orígenes y la historia de nuestro perro nos ayudará a la hora de educarlo, aunque por otro lado, también debemos conocer sus principales características.
Una vez que tengamos toda la información necesaria para educar a nuestro perro, deberemos establecer unas reglas para que nuestro perro las siga, unas reglas que no pueden pasarse por alto en ningún momento. Por mucho que nuestro perro haga unas caritas adorables y nos dé pena, no debemos permitir que supere las reglas, ya que por el contrario, aprovechará cualquier debilidad para asumir el papel de líder en casa.
Mitos y realidades que existen sobre la educación de los perros
Lo que queremos es que nuestro perro nos respete y nos obedezca, de modo que es necesario que seamos firmes, para que este nos muestre un poco de respeto a la hora de entrenarlo.
Esto no quiere decir que debamos pegarle o gritarle, en todo caso esto sería contraproducente, ya que el perro nos tendría miedo y eso no es lo que queremos, ¿verdad?
El mejor método para educarlo es el sistema de las recompensas, ya que una educación positiva es todo lo que un perro necesita, así que cada vez que nuestro perro haga algo bien y nos obedezca, le damos una golosina canina o le aplaudiremos para que sepa que está actuando correctamente.
Por el contrario, cuando se porte mal o desobedezca, le decimos que no con firmeza, así poco a poco comprenderá lo que se permite o no hacer.
Como puedes ver, educar a los perros es una tarea muy simple contando con la información necesaria, así que si sigues estos pasos, tendrás un perro obediente y educado. No te olvides que una alimentación adecuada, el ejercicio y una rutina también son esenciales a la hora de entrenar a un perro.
Muchas personas desinformadas optan por el método del castigo, en donde castigan o golpean al perro cuando no hace lo debido, pero esto lo que generará es que tu mascota te tenga miedo y que tiemble cuando te acerques.
Los perros son inteligentes, pero no tienen la inteligencia de un humano, por lo que debemos ser pacientes con ellos e intentar explicarle de una forma en la que entiendan lo que les quieres decir.
Aunque algunos piensan que no, los perros tal como los seres humanos, son capaces de aprender durante toda su vida.
Es cierto que un cachorro es más fácil de entrenar, pero si adoptas un perro adulto no te sientas desanimado, ya que aparte del miro que existe, es posible que se adapte fácilmente a las condiciones y características de su familia.
¿Porqué adoptar un perro adulto?
Tanto si adoptas un perro adulto como un pequeño, es importante que sepas si recibió el entrenamiento básico, o si por lo menos conoce las normas básicas de sentarse, acostarse, ven, quieto y de pie, ya que esto te indicará el punto donde debes partir.
A su vez, si optas por adoptar un perro adulto, no te olvides de tener suficiente contacto con él, antes de llevarlo a casa y con todos los miembros de la familia. Salir a pasear con él es una buena forma de conocerse y crear un clima de confianza.
Una vez en casa, empezarás un entrenamiento diario, para que de esta forma, te asegures de que no ladre por gusto, estropee tu jardín y llene la casa de tierra o te estropee los muebles con sus dientes y uñas.
El proceso de socialización de un animal es determinante para su vida como parte de una familia. La socialización de un perro comienza desde que abre los ojos, en sus primeras semanas después de nacer y es un proceso que nunca finaliza.