A casi todas las personas les gusta tener un perro o mascota en casa (a unos más que a otros) y esto a veces puede suponer un problema, pero hay que ser claros en algo, el problema no siempre es del perro, el problema es del humano que no sabe cómo tener un perro y comete muchos errores tratando de hacerlo un miembro más de la familia.
A continuación te vamos a enumerar los errores más comunes que se cometen cuando se tiene a estos pequeños animalitos en casa (o grandes, según la raza que sea).
Humanizar al perro es algo que no debemos de hacer
Este es uno de los errores más comunes, ya que es muy frecuente ver perros en el parque paseando con zapatos, perritas con faldas, lazos o adornos en las orejas y hasta las uñas pintadas. Aunque hay también los más extremos que hasta quieren peinar a sus perros como ellos mismos e intentan teñirles el pelo de formas extravagantes que en nada tienen que ver con lo que un perro normal debe ser.
Acostumbrar al perro a comer de nuestra comida en la mesa
No hay nada más incómodo que un perro mirando con ojos pedigüeños a las personas que están comiendo, esperando que les arrojen comida o peor aún, que les permitan comer de su plato. Esto ocurre generalmente porque el dueño del perro se lo ha permitido antes y le ha acostumbrado así, puede que a ti como dueño del perro no te moleste, pero a otras personas si les puede molestar e incomodar muchísimo.
Ellos también necesitan tener nuevos y buenos amigos
Cuando paseas con tu perro por el parque o por cualquier lugar que sea apropiado para ellos, siempre van a buscar a otros perros también en la misma situación, déjalos que se conozcan, que entrecrucen olores, probablemente serán buenos amigos de allí en adelante, esa socialización también es necesaria entre ellos, los hará sentirse que no son únicos, que pueden compartir y disfrutar de la compañía canina de su congénere.
Aprovecha el momento para enseñarle que tiene un tiempo determinado para socializar y apártalo de su nuevo amigo llamándolo por su nombre y nunca lo hagas tirando con fuerza de la correa, eso no es conveniente ni sano para tu mascota.
Enséñale donde están los límites
Esto se aplica cuando a tu perro le has permitido que duerma en tu cama o se suba al sofá cada vez que se le antoja, habrá momentos en que no se le debe admitir esos gustos, por ejemplo, un día llegará de la calle mojado o lleno de barro y queriéndose subir a la cama, es ese el momento que debes aprovechar y decir que no se suba en esas condiciones, probablemente quizás sea el momento que más quería encaramarse, pero es el mejor momento también para educarlo.
Recuerda que es un perro y no razona como ser humano
A veces exigimos a nuestro perro que actúe como un ser humano, que haga las cosas que se le han enseñado de una manera natural y sin estárselo recordando, craso error, ellos aprenden tal vez más por repetición que por otro método.
Déjalos ser perros, ellos necesitan actuar como tales animales que son, juegan, hacen pis en lugares que no deberían, se hacen cacas en momentos inoportunos, ladran a personas desconocidas, cuidan de tu casa, en fin, es su mundo y lo que queda es educarlos.
Querer que huela bien
Los perros tienen su olor específico y propio de ellos, así como los demás animales, tratar de cambiarles su olor natural es antinatural, lo que pudiera ser buen olor para nosotros para ellos significan algo horroroso, además, ese “buen gesto” de su amo le podría generar distanciamiento o separación (hasta discriminación) de sus amigos perros, que lo descartarían de su grupo por el olor extraño, hay otros utensilios que se pueden usar para la limpieza canina y que no alterarán su olor natural.
Someterlos a extremos ejercicios para que se cansen
Otro error que cometemos es someter a nuestro perro a ejercicios extenuantes con la finalidad que lleguen cansados a casa y se queden tranquilos, esa práctica por el contrario genera ansiedad en el perro que va a querer estar en permanente actividad.
Existe un método que a veces resulta exitoso y es someterlo a pruebas olfativas (juegos de olores), esto les genera cansancio y por consiguiente los mandara a descansar.