Lanzar la pelota es uno de los juegos más comunes que realizamos con nuestros perros. Esta actividad no solo les proporciona diversión, sino que también les ayuda a liberar energía. Sin embargo, lejos de ser únicamente inofensivo, este juego puede tener consecuencias negativas, especialmente si se convierte en una obsesión para ellos.
Por qué perseguir la pelota puede ser perjudicial
Perseguir la pelota activa el instinto natural de caza de los perros, siendo más notorio en ciertas razas que en otras. En la naturaleza, los antecesores de nuestros perros, como los lobos, suelen recorrer grandes distancias para cazar, pero lo hacen con un nivel de excitación mucho menor que el que provoca este juego repetitivo. Introducir una actividad que despierte este instinto de forma repetitiva y sin control puede alterar su equilibrio emocional.
El verdadero problema radica en la obsesión que algunos perros desarrollan por este tipo de juegos. Un perro obsesionado puede mostrar comportamientos como ladridos, saltos y otras conductas de demanda constante. Este tipo de ansiedad no solo afecta su comportamiento, sino que también puede derivar en problemas físicos como taquicardia.
¿Cómo identificar si mi perro está obsesionado con la pelota?
Es fundamental reconocer las señales que indican que nuestra mascota está desarrollando una obsesión. Entre los síntomas más comunes destacan:
- Demandar continuamente el juego: ladrar, traer la pelota constantemente o quedarse mirando fijamente hasta que se la lancemos.
- Falta de interés en otras actividades: ignorar juegos alternativos, comida o incluso interacción con otros perros.
- Ansiedad o nerviosismo: lloriqueos, gemidos o hiperactividad cuando se acerca la hora del juego.
- Reacciones agresivas: si otro perro intenta tomar la pelota o interfiere en el juego.
Un perro obsesionado no logra relajarse y puede presentar problemas de comportamiento de largo plazo si no se corrigen estas conductas.
Consejos para jugar con la pelota de forma segura
Aunque jugar con la pelota no tiene por qué ser problemático, es necesario establecer límites y estructurar la actividad para evitar que se convierta en un problema. Aquí tienes algunas pautas esenciales:
- Controla el inicio y el fin del juego: El perro debe entender que eres tú quien decide cuándo empieza y termina el juego.
- Establece un tiempo límite: No juegues con la pelota durante más de 10 o 15 minutos continuos. Esto evitará niveles excesivos de excitación.
- Introduce comandos de obediencia: Pide a tu perro que se siente o espere antes de lanzarle la pelota. Esto refuerza la disciplina y reduce la ansiedad.
- No cedas a sus demandas: Si el perro insiste en seguir jugando, ignora sus ladridos o comportamientos exigentes.
- Alterna actividades: Introduce juegos de olfato, caminatas largas o ejercicios mentales para equilibrar su rutina.
Alternativas al juego de la pelota
1. Juegos de búsqueda y olfato
Una excelente manera de calmar el instinto cazador de tu perro es mediante juegos de olfato. En lugar de lanzar la pelota, escóndela en un lugar seguro y pídele a tu mascota que la encuentre. Este tipo de actividad no solo cansa más, sino que fomenta un ejercicio mental muy beneficioso.
2. Juegos interactivos
Los juguetes interactivos para perros, como los dispensadores de premios y los rompecabezas, son ideales para mantener a tu perro entretenido mientras estimula su inteligencia. Este tipo de actividades también ayudan a reducir la ansiedad en perros que pasan mucho tiempo solos.
3. Paseos y socialización
Un paseo diario con estímulos variados, como nuevos olores y encuentros con otros perros, es fundamental para el bienestar de tu mascota. Además, estas experiencias le ayudan a canalizar su energía de forma natural.
El papel de los juguetes adecuados
Elegir los juguetes adecuados para tu perro puede marcar la diferencia. Es importante entender que no todos los juguetes son aptos para todas las razas o personalidades. Opta por juguetes diseñados para satisfacer sus necesidades específicas. Evita aquellos que promuevan conductas obsesivas y prioriza los que fomenten un juego más equilibrado.
¿Cuándo consultar a un experto?
Si notas que, a pesar de implementar estos consejos, tu perro sigue mostrando signos de obsesión o ansiedad, es fundamental acudir a un especialista en comportamiento canino o a un veterinario. Un profesional podrá evaluar su estado mental y ayudarte a diseñar un plan personalizado para mejorar su calidad de vida.
El bienestar de nuestras mascotas depende directamente de cómo estructuramos su día a día. Formar un vínculo saludable con nuestro perro implica equilibrar amor, disciplina y actividades que nutran tanto su cuerpo como su mente.
Hola
Tengo una Mini pincher de dos años el caso es que ella va a la calle y no lleva pelota y si ve a un perro con la pelota ni la toca,respeta lo que no es suyo
El caso es que cuando llega a casa de obsesiona con su pelota.Antes de la lanzaba y me la traía ahora cosa de un mes le lanzas la pelota y va con ella en la boca corriendo por el jardín y olfateandi luego la deja sigue olfateando y cuando se acuerda se tira donde la pelota como si hubiera cazado y sigue con ella en la boca y no para.
El caso es que cuando quiero que para se pone a llorar hasta que consigo relajados,cada vez me cuesta más que puedo hacer?
Hola Clara,
Procura seguir los consejos del post, reduciendo el tiempo del juego progresivamente y escondiendo la pelota cuando tu perra no esté jugando con ella. Trata de desviar su atención con otro juguete y, antes de comenzar a lanzar la pelota, espera a que se calme para no alimentar más su ansiedad. Dar largos paseos con ella también te ayudará, ya que si llega a casa cansada y calmada no tendrá tantas ganas de jugar con la pelota.
El Pinscher suele ser una raza muy nerviosa y activa, por lo que las grandes dosis de ejercicio físico la ayudarán a olvidar su obsesión. Puede que el proceso te lleve bastante tiempo, pero seguro que con estos métodos y mucha paciencia acabarás consiguiéndolo. Sin embargo, si notas que la obesión de tu perra aumenta demasiado, lo mejor será que recurras a un adiestrador profesional.
Siento no ser de más ayuda. Ánimo y suerte, y gracias por comentar. Un abrazo.
Hola yo tengo un Border collie de dos años y medio. Y le gusta mucho jugar con la pelota en el pipican, pero es muy obsesivo y no para con ella te la trae en los pies es un sin parar.
Nos gustaría quitarle la obsesión que tiene con la pelota, si se la quito a veces va corriendo contra los machos, eso si q me precupa.
Solamente juega en el pipican,alguna forma??
Gracias
Mercè
Hola, tengo adoptada una perrita cruce de podenco y yorky (parece) y tiene autentica obsesión x las pelotas, chuches o todo lo que pueda manglar en los parques, no juega ni corre ni nada …. Y yo no le bajo la pelota asi me maten, xque tengo una lesión en columna y agacharme es ver las estrellas.
Alguien sabe como podría quitarle esta obsesión??? Estoy desesperada, xque veo como única solución llevarla solo atada a pasear, con lo que se convertirá en «asocial» total … Y no quiero!
Hola Yolanda. Desde Mundo Perros siempre recomendamos pasear a nuestros perros con correa, ya que de esta forma evitamos problemas como robos, atropellos o pérdidas, y además nos ayuda a controlar las cosas que puedan comer del suelo. Eso no tiene por qué afectar negativamente a su sociabilidad.
Por otro lado, si tu perrita tiene obsesión por la pelota lo mejor es que limites los tiempos del juego y no cedas cuando la pida con insistencia. No jugar con ella en la calle es una buena idea, de esa forma se centrará en caminar y equilibrará su nivel de energía. Los grandes paseos son muy recomendables para controlar su ansiedad; una vez esté tranquila, puedes jugar con ella a la pelota.
En cualquier caso, si notas que este juego genera una gran ansiedad en tu perrita lo mejor será que lo consultes con el veterinario o con un educador canino.
Siento no ser de más ayuda. Un abrazo y suerte.