Aunque todavía queda mucho camino por recorrer en este sentido, durante los últimos años está aumentando el número de empresas que permite a sus empleados llevar a sus mascotas a los lugares de trabajo. Y es que esto proporciona innumerables beneficios para estas compañías, ya que entre otras ventajas, reduce el estrés de sus trabajadores, aumentando con ello el rendimiento. De ahí que cada vez encontremos más oficinas Dog Friendly alrededor del mundo.
Para que esto sea posible, toda la plantilla debe estar de acuerdo y establecer unas reglas básicas. Por ejemplo, los animales deben estar bien socializados y cumplir ciertas normas de higiene. Además, cada propietario debe hacerse cargo de las necesidades de su perro, al ser su máximo responsable. Es conveniente también que todos ellos firmaran un seguro de daños, comprometiéndose a asumir las molestias que pudiera causar su mascota.
Como decíamos, trabajar junto a nuestra mascota nos aporta un buen número de beneficios. Para empezar, disminuye el estrés del empleado, pues no tiene que preocuparse por la cantidad de horas que el perro pasa solo en casa y además, disfruta de su compañía. La presencia del animal favorece un buen ambiente, una actitud positiva y un mejor estado de ánimo.
Asimismo, los expertos aseguran que la presencia de un can en una empresa fomenta la creatividad y el compañerismo dentro de la compañía. Compartir las horas de trabajo con estos animales propicia una mejora de la comunicación entre los compañeros, facilitando el inicio de las conversaciones y la lluvia de ideas.
Otra gran ventaja de las oficinas Dog Friendly es que nos ayudan a estrechar el vínculo con nuestro perro. Al pasar más horas con él, no sólo nos sentiremos más tranquilos y satisfechos, sino que también lograremos que el animal aumente su confianza en nosotros. En definitiva, mejoraremos nuestra relación y estado anímico.