A un cachorro o a un perro adulto le encanta estar corriendo sin estar sin correa, siguiendo su instinto de curiosidad, sin embargo y aunque los perros son unos animales muy cariñosos, a los que les encanta la compañía y el amor que un ser humano puede ofrecerle, desean correr libremente.
Por otro lado y como ya sabemos, muchos perros tienen esas ganas de andar libre, sin correa por el mundo, pero existen momentos en que por descuido del dueño al pasear con el perro por la calle o simplemente dejar la puerta de la casa abierta, el animal se escapa y no tiene idea de cómo volver y termina perdiéndose.
A ninguna persona le gusta recibir una llamada de la perrera informando de que su perro ha sido descubierto serpenteando el camino, sin embargo, incluso un perro por muy enseñado que este puede huir y terminar donde no debería.
En numerosas comunidades, puedes encontrarte con inconvenientes legales si descubren a tu perro paseando libremente por la carretera. Más aún, porque un perro puede provocar daños en la propiedad de otros individuos, incluso también puede dañar a otros e individuos.
Posibles causas por las que tu perro se escapa
Los perros que huyen de casa son generalmente animales que no están entrenados o agotados.
Un perro al que no se le presta atención suficiente es un perro que tiene más papeletas para fugarse, como no jugar con él, descuidar su tazón de agua o comida, que no tenga un lugar razonable para descansar, algún sitio para esconderse de la lluvia o del sol, cualquier cosa que tu perro pueda necesitar.
Obviamente, una cerca suficientemente alta y una entrada cerrada apropiadamente impedirán que tu perro huya y recuerda que si tu perro se escapa, contamos con la opción de que nuestro perro se lance bajo las ruedas de un coche o un ciclista, por ejemplo.
Un cachorro tiende a fugarse mucho menos que un perro ya adulto, de hecho, solamente jugando con ellos y casándolos un poco cuando regreses a casa disminuirá increíblemente el peligro de huir cuando este fuera de casa. En el caso de que consigas que tu perro juegue contigo antes de irte, será algo que lo mantendrá tranquilo y calmado, probablemente este estará durmiendo mientras va cargándose de energía.
Tu perro tiene que hacer caso a tu llamada
Una de las órdenes más vitales y fundamentales que debes enseñar a tu perro, es venir cuando lo llames y es que a pesar de las circunstancias y si has ayudado a tu perro correctamente, tendrás la capacidad de mantener el control de tu cachorro en casa y a plena luz del día.
En el caso de que tu cachorro se escape de su cadena o de tu casa, te darás cuenta de que si lo llamas volverá, quedándote más tranquilo por esa parte y es que para cualquier perro es esencial que su dueño trabaje diariamente con él para poder enseñarle ese tipo de orden.
En resumen, tu mascota tiene que aprender estas dos órdenes, sobre todo cuando le llames y cuando le digas que se quede quieto, estas dos órdenes son súper importantes para cualquier perro, ya sea cachorro o adulto. Una vez que la orden es obedecida en gran medida por el perro, el dueño puede enseñarle estas órdenes sin utilizar la correa y para esto, es mejor enseñar a un perro estas órdenes en un sitio cerrado hasta que el cachorro reaccione a la petición de venir.
Cuando estés seguro de que tu mascota ya ha aprendido a hacerte caso a esas dos órdenes tan importantes, nunca más tendrás que mantenerlo atado y con miedo de que se fugue, siendo esta una muestra de flexibilidad tanto para el canino como para el dueño.