Son muchos los deportes caninos que nos ayudan a trabajar la concentración, la agilidad, la fuerza y el equilibrio mental de nuestra mascota, además de reforzar el vínculo emocional con ella. Uno de ellos es el Schutzhund; originalmente creado para examinar las capacidades de los perros de trabajo, actualmente es considerado como una actividad deportiva de gran utilidad.
Nació a principios del siglo XX en Alemania como método para evaluar las aptitudes de los pastores alemanes para cumplir con diferentes misiones. De hecho, el término Schutzhund significa “perro de protección”, aunque este deporte también es conocido por las siglas IPO/IGP (Internationale Prüfungs-Ordnung). Se trata de una serie de pruebas diseñadas para valorar el carácter y las capacidades del animal como guardián o protector.
Fueron desarrolladas por el aristócrata Max Von Stephanitz con el objetivo de preservar la raza que él mismo había creado, el Pastor Alemán. A través de estas pruebas seleccionaba a los mejores ejemplares para la reproducción, asegurándose de que las finalizaban con éxito. Con el paso de los años, el Schutzhund es practicado por un buen número de razas, como el Rottweiler, el Bóxer o el Pastor Holandés.
Esta disciplina es muy utilizada como entrenamiento y evaluación de perros de trabajo, ya que abarca tres importantes disciplinas: rastreo, obediencia y defensa. Estas actividades ponen a prueba la estabilidad mental y emocional del perro, así como su resistencia y voluntad. No obstante, actualmente existen modalidades deportivas que admiten la participación de todas las razas y han dado lugar a diferentes competiciones.
Las mismas constan de tres niveles: nivel inicial (SchH1), nivel medio (SchH2) y nivel avanzado (SchH3). Se dividen en las tres disciplinas anteriormente mencionadas, las cuales unos jueces especializados puntúan con un máximo de 100 puntos. Asimismo, evalúan el trabajo del adiestrador, analizando cómo el can responde a sus órdenes y movimientos.
El Schutzhund no es tan popular como otros deportes caninos, aunque durante los últimos años está cobrando fuerza. Existen clubes oficiales donde se practica e incluso campeonatos locales e internacionales; de hecho hay países que cuentan con su propio equipo nacional. Si queremos saber más sobre este deporte podemos contactar con algún centro de adiestramiento especializado de nuestra Comunidad.
Origen, propósito y evolución del Schutzhund/IGP

El Schutzhund surgió cuando en Europa occidental abundaban los perros pastores sin estandarización racial clara, empleados para guiar y proteger ganado y avisar de intrusos. Con la creación del club de raza del Pastor Alemán (SV), se fijaron estándares y se formalizaron pruebas de rastreo, obediencia y protección para preservar un temperamento equilibrado y aptitudes útiles en mensajería, guarda, rescate y trabajos policiales. La prueba pasó de ser un filtro de cría a un deporte internacional que mantiene la esencia: demostrar el valor de un perro a través del entrenamiento.
Los ejemplares que superan sus niveles muestran rasgos clave para el trabajo: alegría al trabajar, devoción al guía, confianza, docilidad, obediencia, capacidad de aprendizaje, rapidez de comprensión, además de dureza y seguridad sin perder estabilidad. También se valoran fuerza, resistencia, agilidad y un olfato fino para el rastro.
Disciplinas: lo que evalúa cada fase

Rastreo (Sección A): mide perseverancia, concentración y capacidad olfativa. El perro sigue la pista de un trazador y indica artículos (madera, cuero, textil). En niveles iniciales el guía puede trazar; en intermedios y avanzados lo hace un desconocido, con mayor longitud, más ángulos y mayor tiempo de enfriamiento del rastro.
Obediencia (Sección B): evalúa sensibilidad a la voz y gestos, precisión y actitud. Incluye caminar junto sin correa con cambios de ritmo, posiciones en movimiento, cobros en llano y sobre obstáculos, llamadas controladas, envío hacia adelante y neutralidad ante distracciones y extraños.
Protección (Sección C): analiza coraje, control y obediencia bajo alta excitación. El perro busca y vigila al figurante oculto, impide fugas, ejecuta mordida en manga acolchada y suelta a la orden de inmediato. El juez puede descalificar ante fallos serios de temperamento. El figurante emplea manga y bastón acolchado para valorar firmeza sin causar daño.
Niveles, títulos y puntuación

Los niveles clásicos son SchH1, SchH2 y SchH3 (equivalentes IGP 1, 2 y 3), con exigencias crecientes en distancias de rastro, complejidad de ejercicios de obediencia y control en protección. Cada fase se puntúa sobre 100 puntos y existen mínimos para homologar el título. Además del perro, se valora la técnica del guía y la correcta conducción.
En rastro, progresa la longitud, los ángulos y la antigüedad de la pista; en obediencia se añaden cobros sobre obstáculos y mayor precisión; en protección crecen la presión del figurante y las exigencias de autocontrol. Un equipo de nivel III exhibe armonía y solvencia propias del alto rendimiento.
Razas habituales y aptitudes deseadas

Aunque nació para el Pastor Alemán (especialmente líneas de trabajo), participan con éxito el Pastor Belga Malinois, Beauceron, Briard, Rottweiler, Dóberman, Schnauzer gigante, Bouvier de Flandes, Pastor Holandés, Bulldog Americano, Bóxer, Cane Corso y más. Se buscan perros con instinto de presa y colaboración, curiosos, seguros, perseverantes y con gran capacidad de entrenamiento.
Entrenamiento, material y seguridad

La base es la obediencia y el refuerzo positivo; para profundizar, consulta las claves del adiestramiento canino. La constancia y sesiones breves mantienen alta la motivación. Para iniciar: collar adecuado, correa larga (10 m) para rastro, pelotas y mordedores, premios de alto valor y un campo seguro. En protección, solo con equipo homologado (manga, traje, bastón acolchado) y un figurante cualificado.
En cachorros, se fomenta el juego, la curiosidad y el autocontrol sin coerción. El guía debe ser un líder amable: nada de atemorizar; se construye una relación sólida que impulsa el rendimiento.
Ámbito deportivo, trabajo real y marco legal

El IGP está regulado por la FCI y tiene presencia en federaciones de raza como la WUSV (Pastor Alemán) y la FMBB (Pastores Belgas), con campeonatos mundiales y equipos nacionales. Muchos perros con títulos destacan en policía, detección, búsqueda y rescate o control de masas por su equilibrio y fiabilidad.
Es clave distinguir el adiestramiento deportivo de protección (centrado en el instinto de presa y siempre supeditado a la obediencia) del adiestramiento de guardia civil, regulado por normativas específicas en distintos países. En deporte, la seguridad y el control son prioritarios y la obediencia precede a la protección.
Consejos prácticos y resolución de problemas

– Empieza por una obediencia sólida y progresiones claras en cada fase. – Fortalece el vínculo guía–perro con juego estructurado. – Si surge agresión o frustración, trabaja con un adiestrador/etólogo. – Mantén sesiones variadas y objetivos medibles. – Complementa con deportes como agility o canicross para enriquecer la mente y el cuerpo.
Esta disciplina, exigente y apasionante, impulsa el bienestar físico y emocional del perro y potencia habilidades útiles dentro y fuera del terreno de competición, siempre bajo una filosofía de control, equilibrio y respeto.