¿Has observado alguna vez a tu perro temblar sin motivo? Si es así, lo que te voy a contar ahora te puede interesar. Una de las enfermedades que puede padecer es el síndrome de Shaker, que se conoce también como el síndrome del perro tembloroso o cerebelitis idiopática.
Para saber por qué aparece, cuáles son los síntomas y, lo más importante, su tratamiento, te invito a que continúes leyendo.
¿Qué es el síndrome de Shaker?
Se trata de una enfermedad que consiste en una inflamación del cerebelo, que es la parte del sistema nervioso encargada de la coordinación de los movimientos y de las contracciones voluntarias de los músculos.
Aunque no se puede saber a ciencia cierta por qué aparece, sí se sabe que si el animal padece algún trastorno del sistema nervioso central y/o si tiene el pelaje blanco tendrá una mayor probabilidad de padecerlo.
¿Cuáles son los síntomas y su diagnóstico?
Tan sólo hay un único síntoma: temblor difuso y generalizado que no se detiene rápidamente. Como únicamente hay uno, para poder hacer el diagnóstico el veterinario tiene que hacer un análisis de orina, de sangre y de los niveles de electrolitos, así como tomar una muestra del líquido cefalorraquídeo. Asimismo, nos preguntará cuándo comenzó a temblar de esta manera y cómo ha ido desarrollando.
¿Cómo se trata?
Una vez que el profesional ha podido hacer un diagnóstico nos puede llegar a hospitalizar al perro para estabilizarlo. Además, le comenzará a tratar con cortisona, que es un antiinflamatorio que reducirá la inflamación de los tejidos. Así, es posible que mejore en una semana más o menos, pero también podría empeorar, motivo por el cual hay que seguir siempre los consejos del profesional.
¿Hay alguna manera de evitarlo? No al 100%. Una buena alimentación (sin cereales) y los cuidados básicos (paseos, juegos, cariño, higiene) son muy importantes para que el animal pueda gozar de una buena salud y de una mejor calidad de vida, pero lamentablemente no es suficiente para reducir el riesgo de padecer el síndrome de Shaker.