El perro es uno de los animales más allegados a nuestro hogar es que su comportamiento y característica hacen de este animal uno de los más simpáticos.
Hoy en día los perros cumplen múltiples funciones dentro de la sociedad, cumpliendo roles como los de perro guardián, sabueso, buscador de drogas, entre otros. Para esta clase de funciones, lo perros reciben previamente un entrenamiento progresivo, dando lugar a un fiel sirviente y a un amigo que estará 24 horas al día preparado para cualquier imprevisto.
Pero, ¿Cómo hacer para que nuestro perro no tenga miedo?
Dentro de todo el marco de las funciones del perro, una de las funciones más notorias y características es su audición, ya que se dice que los perros tienen una audición cinco veces más sensible que las de cualquier humano.
Es por esta razón que los perros pueden percibir con mayor facilidad la aproximación de fenómenos sísmicos, así como también la de prevenirnos sobre desastres naturales inminentes. Sea cual sea el caso, la audición es una de las virtudes más notorias de los perros, razón por la cual son hoy en día uno de los animales más importantes dentro de la sociedad y sus múltiples tareas del día a día.
Así pues, existe también un contra y es que debido a la gran sensibilidad que presentan los perros en relación a su audición, podemos notar cómo algunos sonidos pueden resultar muy molestos para ellos, llegando al punto de inclusive asustarlos o perturbarlos de forma permanente. Tal es el caso de los fuegos artificiales, muy empleados en fiestas patronales y en épocas decembrinas. Por esta razón, el presente artículo ofrecerá algunos consejos para mantener a vuestro perro a salvo ante el sonido de los perros artificiales, evitando que éste se asuste ante dicho sonido.
¿Cuál es el método Tellington Ttouch?
Entre los más populares métodos para lidiar con la fobia a los fuegos artificiales, tenemos el método Tellington Ttouch, una técnica empleada en muchos países hoy en día, la cual ha adquirido fama con el pasar del tiempo.
Principalmente, este método se realizaba con caballos y la idea consistía en aplicar una serie de vendajes a estos animales, para lo cual y a través de una serie de masajes y técnicas de tacto, poder acostumbrarlos y disminuir la tensión que éstos sufren ante eventos de ruidos fuertes.
El caso de los perros resulta muy similar, ya que esta serie de cintas se aplican para disminuir los niveles de tensión que los perros pueden llegar a sentir en ciertas zonas de su cuerpo al momento de escuchar los fuegos artificiales, disminuyendo así la tensión y el miedo que éstos pueden llegar a sentir mientras escuchan los fuegos artificiales.
El cubrimiento de la cinta a lo largo del cuerpo del perro genera una forma parecida a un número ocho en el cuerpo de animal. La idea consiste en rodear el cuerpo del cuerpo sin posar el vendaje sobre su columna.
Esta técnica responde también a un tema conductual, el cual le permitirá a los perros afrontar la situación de ruido de una manera más efectiva. Es por esto que debemos tomar en cuenta esta clase de métodos, pues, generalmente, son muchos los propietarios que deciden optar por la sedación de su perro, método que puede resultar algo dañino para la salud del mismo.
De esta manera, los perros podrían ir adaptándose de manera progresiva a esta clase de situaciones sin comprometer su integridad y su bienestar psicológico.
¿Y qué mejor manera de afrontar un miedo que desafiándolo?
Este método procura que los perros puedan lidiar con el temor a los ruidos fuertes de la manera más efectiva posible, razón por la cual es necesario tomar en cuenta lo psicológico o conductual como una alternativa para lidiar contra el sonido de los fuegos artificiales presentes no solo en las épocas decembrinas, sino también en situaciones de fiestas patronales o festividades similares.