Si quieres ponerte en forma y compartir tiempo con tu perro, puede que el canicross sea la solución. Hablamos de ese deporte, cada vez más popular, en el que el perro y el dueño corren juntos. Evidentemente, ambos deben comenzar con cierta base física para poder realizar un deporte exigente, sobre todo si tenemos pensado competir en un futuro.
Hay diferencias en practicar el canicross como simple afición o involucrarse en carreras profesionales que se llevan a cabo más o menos desde octubre, ya que no se recomienda que los perros corran con temperaturas altas. En este sentido, puede participar mucha gente, siempre que cumplan las reglas para dueños y perros en las carreras.
Comenzar con el canicross es sencillo. Podemos practicar haciendo primero pequeñas carreras con el perro y con una correa larga, para ver cómo reacciona, educándolo para que no tire en exceso y siempre nos tenga en cuenta cuando va corriendo. Es importante también que no pare en seco o se distraiga con otros estímulos, para realizar un trote de carrera continuo.
El material es un cinturón de canicross para el corredor, así como la línea de tiro, que une al corredor con el arnés de tiro del perro. El perro nunca debe ir más allá de los dos metros delante del corredor. Es importante que ambos practiquen juntos y se acostumbren a esta dinámica para rendir el día de la carrera.
El canicross aporta amplios beneficios a los dos. Tanto el perro como el dueño estarán en mejor forma física, aunque siempre hay que tener cuidado para evitar las lesiones en ambos. Además, esto les ayuda a conectar mucho más, creando un vínculo entre ambos, algo que pasa cuando nos tomamos nuestro tiempo para estar con la mascota. Y esto sin mencionar lo divertido que puede ser disfrutar de estas carreras al aire libre con el perro.