Son muchos los perros que con la edad van desarrollando la artrosis en sus articulaciones. Esta enfermedad hace que el cartílago se erosione y vaya degenerando, además de que hay nueva formación de hueso en los márgenes de las articulaciones. Esto supone no solo más problemas a la hora de moverse, sino también a veces molestias y dolor.
Es importante reconocer a tiempo los síntomas de la artrosis. Aunque se trata de algo degenerativo, que no se puede curar, lo cierto es que sí se pueden paliar sus consecuencias y ofrecerle un mejor nivel de vida al perro frenando esa degeneración en las articulaciones.
Los síntomas de la artrosis en el perro se pueden reconocer fácilmente, porque es un proceso que aparece lentamente y va a peor. Si al perro le cuesta levantarse, o comienza a tener una ligera cojera en momentos puntuales, al andar mucho o cuando hay ambiente húmedo o en invierno, es que la artrosis puede estar apareciendo. Lo mejor en el caso de sospechar este problema es ponerse en contacto con el veterinario para que nos aclare si realmente se trata de artrosis o de algo puntual.
La artrosis es un problema que se va agravando, sobre todo con la edad. Es por eso que es muy importante intentar paliar y frenar su avance desde el primer momento. Los condoprotectores son medicamentos que se le suministran y que además de alivio les frena esa artrosis.
Además, podemos ayudarles llevándolos a caminar por terrenos blandos, y evitando que se mojen cuando llueve o que el pelaje les quede húmedo. Por otro lado, podemos darles masajes, y hacer que duerman en lugares secos y con buena temperatura, hay que evitar el frío y la humedad para que el problema no vaya a peor. También es mejor evitar el exceso de peso en la mascota.