El hocico de un perro sano tiene que estar normalmente húmedo. Su trufa es un lugar muy sensible, que cuenta con muchos receptores para captar los olores hasta niveles que no podemos imaginarnos. Es un parte muy importante para ellos, ya que reconocen muchas cosas exclusivamente con el olor, uno de sus sentidos más desarrollados. No obstante, en ocasiones pueden sufrir sequedad en la nariz.
La sequedad en la nariz del perro puede tener varias causas y hay que tratarla para evitar que se produzcan otros problemas como grietas o heridas en la trufa. Debemos reconocer los problemas y causas de esta sequedad para poder combatirla y mantener una buena salud en la nariz de nuestra mascota, una parte de su anatomía que es muy necesaria para ellos.
Por qué se seca su nariz
La sequedad en la nariz del perro puede deberse a varias causas. Lo primero en lo que debemos fijarnos es en si se trata de algo puntual o de algo que se va prolongando en el tiempo. La sequedad puntual puede darse por varias razones. Esa falta de hidratación puede deberse a que el ambiente está seco, a que ha caminado tiempo al sol y está algo deshidratado o bien a que ha estado durmiendo, con lo que la nariz no segrega tanta humedad y se queda seca. De hecho si compruebas esto la próxima vez que tu perro lleve tiempo durmiendo verás que su trufa está seca, pero es algo momentáneo y cuando despierte y vuelva a su actividad de nuevo volverá a estar húmeda como siempre.
En caso de que se prolongue esa sequedad durante más de un día ya debemos comenzar a preocuparnos porque puede haber otras causas que sean más preocupantes. La nariz seca puede deberse a que el perro tenga fiebre. Esto es bastante fácil de comprobar, porque la trufa además de seca estará caliente. En este punto tendremos que llevarlo al veterinario para que busque la causa de su malestar. También puede deberse a que el perro se encuentre deshidratado debido a vómitos o diarreas, por lo que tendremos que tratarlo igualmente en el veterinario. Otras causas pueden ser enfermedades tales como el moquillo, que produce secreciones nasales y sequedad. Esta enfermedad es bastante grave, por lo que tendremos que llevar al perro rápidamente al veterinario para que paute un tratamiento.
Qué pasa si tiene la nariz seca
Un perro con la nariz seca un día no tendrá ningún problema, porque la humedad volverá a restablecerse rápido cuando vuelva a la normalidad. Pero si la sequedad se prolonga esto puede dar lugar a grietas en la nariz o incluso a despigmentación. Las grietas y heridas en una zona como esta son muy molestas, ya que hablamos de una parte muy sensible de su anatomía. Antes de que se produzcan estas grietas debemos comprar algún producto hidratante que el perro pueda ingerir sin que le haga daño, ya que es una zona a la que tiene muy fácil acceso con la lengua. Este tipo de productos son pensados específicamente para los perros, ya que tienen el problema de que pueden ingerir aquello que les ponemos en las heridas e intoxicarse. Un buen remedio natural casero es el de aplicar miel, ya que esta es antibiótica, ayuda a curar heridas y además es muy humectante, ayudando a hidratar la zona.
Cómo actuar ante la nariz seca
Lo primero que debemos hacer es ver si esto es algo puntual. Si vemos que se prolonga tendremos que fijarnos en el estado de salud general del perro, pues puede que tenga otros síntomas que hayan pasado desapercibidos. Hidratarlo en estos casos es fundamental. Si vemos que el perro se encuentra mal siempre debemos acudir al veterinario en busca de consejo. Ellos pueden establecer un diagnóstico y la causa concreta de la sequedad en el hocico. Nos ayudarán a darle un tratamiento para evitar que la trufa sufra daños y aparezcan esas molestas grietas o heridas.