Los amantes de los animales suelen optar por profesiones que les permitan tener un contacto directo con ellos, así como ayudarlos, cuidarlos y disfrutar de su compañía. Por ello convertirse en adiestrador de perros puede ser una buena alternativa, pues mediante esta profesión logramos proporcionar equilibrio y estabilidad emocional a aquellos canes que lo necesiten. En este artículo resumimos algunos consejos para formarnos en esta carrera.
Cursos homologados
Desafortunadamente, en España no existe demasiada variedad de cursos homologados en el mercado. No obstante, podemos recurrir a fundaciones, academias o asociaciones. Es importante, a la hora de elegir una opción, que exista cierta uniformidad en sus contenidos y, por supuesto, una conexión entre la parte teórica y la práctica. En general, el curso debe incluir:
- Un temario completo. Debe abarcar aspectos como la anatomía, el lenguaje corporal, las características de las distintas razas, primeros auxilios, el instinto canino, etc.
- Prácticas reales o simuladas. En esta profesión la práctica es fundamental, así como la observación de clases reales de adiestramiento por parte de verdaderos profesionales.
- Material didáctico de calidad. Es importante que el precio de matrícula incluya libros y material de aprendizaje audiovisual. Además, durante la parte práctica debe ofrecerse a los alumnos los accesorios necesarios: correas, silbatos, etc.
- Acreditación. Al finalizar los estudios, el centro debe proporcionar a los alumnos una acreditación oficial. Es importante decidirnos por un centro reconocido o institución oficial.
- Relación calidad-precio. Tenemos que analizar detenidamente si el precio de matrícula es adecuado para los servicios que nos ofrece el centro.
Formación complementaria
A veces el contenido de estos cursos no son lo suficientemente amplios, por lo que es recomendable completarlo con estudios y prácticas adicionales. Para ello podemos, por ejemplo, practicar ofreciendo nuestros servicios en un refugio canino, así como actualizar nuestros conocimientos constantemente mediante libros especializados y medios digitales.
Asimismo, siempre que nos sea posible debemos observar el trabajo de un adiestrador profesional, convirtiéndonos en su ayudante o aprendiz. Esto nos ayudará notablemente a integrarnos en esta profesión y conseguir contactos interesantes.
Paciencia
Dada la situación laboral actual, no es fácil lograr un puesto estable en ninguna profesión. Por ello, lo mejor será que tengamos paciencia y dediquemos unos cuantos años a formarnos de todas las maneras que nos sean posibles, ya sea mediante cursos o de forma autodidacta. La experiencia es esencial para poder ganar prestigio y reconocimiento.