En Navidades todos solemos cometer excesos en el tema de la alimentación. No nos damos cuenta de la cantidad de comida que ingerimos y al final de las fiestas nos encontramos no solo con kilos de más sino con malestar. Pues a nuestras mascotas les puede pasar algo parecido. Esto pasa porque en ocasiones compartimos muchos alimentos con ellos y en estas épocas pueden acabar con una indigestión.
En general no solo debemos tener en cuenta la cantidad de alimento que le damos sino también el tipo de alimentos, porque pueden ser perjudiciales para ellos. Hay alimentos que son incluso prohibidos para los perros, por lo que no está de más tenerlo en cuenta antes de las fiestas.
Los perros sanos pueden comer en general casi de todo lo que nosotros comemos, pero hay algunos alimentos que no debemos darles nunca. El azúcar está bastante prohibido, pero el chocolate queda totalmente vetado, debido a que es venenoso en grandes cantidades para ellos. Sabemos que por un poco no va a pasar nada, pero todo depende también de la salud del perro y de su estómago, que puede ser más o menos fuerte a los cambios. Lo mejor ante la duda es evitar estos alimentos, así como otros que tengan pepitas o los huesos cocinados, que pueden astillarse.
Siempre podemos compartir algunos alimentos con ellos, pero lo cierto es que es mejor moderarse. Ellos no tienen el mismo estómago ni necesitan tanta comida, sobre todo si son razas pequeñas, y con los excesos pueden tener problemas estomacales.
Lo que más nos debe preocupar en estas fiestas es que el perro coma demasiado. La torsión de estómago es una realidad y puede pasarle prácticamente a cualquier perro, teniendo más riesgo si se alimentan en grandes cantidades. Por eso hay que evitar darles demasiada comida.