Cada época del año cuenta con determinadas ventajas e inconvenientes, tanto para nosotros como para nuestras mascotas. En esta ocasión, dado que ya casi hemos entrado en esta estación, nos centramos en la primavera y en los beneficios y peligros que trae consigo. En este sentido, te damos algunos consejos para pasear a tu perro adecuadamente durante los próximos meses.
1. Ajustar el horario. Mientras que durante el invierno se recomienda evitar las horas de más frío, durante la primavera y el verano lo mejor es sacar a pasear al can cuando las temperaturas aún no son demasiado altas. De esta manera prevenimos quemaduras y golpes de calor.
2. Una buena hidratación. Es fundamental llevar con nosotros una botella de agua fresca para ofrecer al animal cuando jadee o se muestre cansado. Lo más recomendable es hacer que beba cada poco tiempo en poca cantidad.
3. Limpiar sus patas. Con la subida de la temperatura, la vegetación se seca y surgen las molestas espigas, que a menudo se enredan entre el pelo o las patas de los perros. Por ello debemos limpiar sus patas después de cada paseo, con el fin de evitar que queden alojadas en su piel o boca cuando el animal intente quitárselas por sí solo.
4. Protección contra los insectos. Como sabemos, durante esta época los insectos comienzan a ser una gran molestia, especialmente en zonas húmedas. Por esta razón es esencial que durante estos meses protejamos a nuestra mascota mediante la aplicación de pipetas, sprays, collares antiparasitarios, y todo aquello que nuestro veterinario de confianza nos indique. Todo ello prestando especial atención a los métodos preventivos contra la Leishmaniosis.
5. La oruga procesionaria. Mención aparte merece este peligroso insecto, cuyo simple contacto o acercamiento puede causar graves alergias en el perro. Desciende de los pinos en marzo, donde anida durante los meses previos, por lo que es recomendable no pasear cerca de estos árboles. En cualquier caso, podemos encontrarlas también en un ambiente urbano, por lo que tenemos que permanecer atentos e impedir que el animal se acerque a esta oruga. En caso de contacto, por muy leve que sea, debemos acudir inmediatamente al veterinario para evitar la asfixia del can.