Día a día, leo entradas en Internet de todo tipo que hablan sobre la alimentación del perro. Dentro de esas entradas, leo a veces verdaderas falacias sobre la alimentación de nuestros perros, las cuales iré poco a poco desentrañando desde aquí. Hay que ir aclarándole las ideas a la gente y no dejar que los falsos mitos sigan ganando terreno. Y esto no es algo fácil.
Es algo mas fácil de decir que de hacer, ya que Internet esta llena de informaciones que se van copiando de un blog a otro, sin ni siquiera cambiar el texto muchas veces. El tema de la entrada que nos ocupa es prueba de ello. Sin mas os dejo con El falso mito de la Cebolla en la alimentación del perro.
Uno de los problemas a los que nos enfrentamos a la hora de desentrañar esa maraña de falsos mitos que se han forjado alrededor de como alimentar a nuestro perro, es el hecho de que las marcas de pienso han inundado de informacion falsa a los consumidores por todos los medios, y eso ha terminado por colocar una serie de leyendas urbanas (no veo otra mejor manera de definirlas) que se repiten de un medio a otro, sin que nadie las contraste. En un articulo anterior, en Historia de la Industria de Pienso para mascotas, os explico como funciona la industria que crea el alimento para nuestros animales. No os la perdáis.
Yendo al meollo del asunto, he leído cientos de veces, en cientos de entradas, de cientos de blogs distintos, que la cebolla es algo mas o menos como veneno mortal para nuestro perro.
Un perro de unos 30 kilos, debe comer mas o menos, un 1% de su peso en cebollas para que le siente mal. Eso quiere decir que habría que darle de comer unos 300 gramos de cebolla al perro para que este sufra una posible intoxicación.
¿Hay algún problema en que mi perro se coma un arroz que tengo, que lleva cebolla? Pues para nada. Como decía Paracelso: Nada es veneno, todo es veneno: la cuestión está en la dosis.
Darle a nuestro perro algo de cebolla en su dieta, es algo que no sera negativo, ya que le aportara nutrientes sanos y naturales,y que por otra parte, es casi inevitable si a veces le damos nuestras sobras.
Un saludo y si tenéis dudas, preguntadme por los comentarios de esta entrada.