La raza de perro Vallhund Sueco es muy apreciada en su país de origen, Suecia, donde se les también se les llama perros vikingos debido a que su origen se remonta a la época de los vikingos cuando se les utilizaba como pastores para el ganado y también como protección.
Origen del vallhund sueco
Se trata de un can de raza propia que tiene detrás su historia y que preserva su carácter trabajador, aun cuando a simple vista nos parezca un mestizo procedente de la mezcla de varias razas.
De su origen se sabe que es de Suecia y que los vikingos ya los usaban para el trabajo de pastoreo y de protección, en cuanto a la fecha y lugar donde apareció por primera vez son datos que no están muy claros. En este país simbolizan al perro nacional y aunque es de raza pequeña hace muy bien el trabajo con el ganado, aunque también se le emplea como can de compañía. El origen de la raza también es un tema que genera discusiones y opiniones encontradas ya que hay quienes aseguran que están vinculados con los corgis, una raza de origen británico cuyo cuerpo es bastante parecido, sin embargo no hay prueba de tal mezcla de razas.
Características
Este perro es de tamaño mediano y se distingue por sus patas acortadas, además es robusto y en general se presenta como un can compacto y alargado bastante peculiar. Llega a medir en su etapa adulta unos 30 centímetros hasta la cruz, con un peso entre 12 y 16 kilogramos. De su cabeza destacan su par de orejas siempre erguidas y de forma triangular que pareciera estar muy alerta de todos los sonidos de alrededor.
Posee ojos muy abiertos y aunque pequeños son bastante expresivos y siempre observando todo a su paso, la nariz es de color negro, sus labios lisos y siempre apretados. Los ejemplares de esta raza pueden presentar dos tipos de cola, la que es larga que por naturaleza se riza en sentido al lomo tal como lo hacen otros canes tipo spitz, aunque también la puede llevar recta. El otro tipo de cola suele ser corta y de tamaño variado.
El pelaje es denso, de largo medio y grueso, este se presente en una capa superficial y una inferior más suave que le ayuda a protegerse de las bajas temperaturas suecas. En el área del cuello es donde la capa suele ser más larga, así como en la cola, vientre y las patas. Los colores de su manto varían entre el amarillo con matices de gris, el rojizo, el gris, grisáceo y marrón. En un mismo ejemplar el pelaje puede presentarse en tonos más claros en zonas específicas como el pecho, hocico y garganta, o más oscuros en los lados del cuerpo y también el cuello.
Comportamiento
Su naturaleza se ha mantenido invariable desde sus orígenes hasta el presente, por lo tanto su carácter de perro pastor, guardián y cazador de pequeños mamíferos es el mismo.
Pero no es lo único, ya que es esa misma disposición que tiene por naturaleza para el trabajo, lo que le hace un animal muy inteligente, intuitivo, que afronta retos continuamente, de fácil aprendizaje adquiriendo todo tipo de habilidades si tiene la oportunidad. Es por ello que se las ha visto desempeñarse bastante bien en pistas caninas de agilidad y también en juegos interactivos. En el ámbito familiar, el vallhund es un can bastante afectuoso con quienes siempre le rodean además de que los protege, es por esta razón que ante la presencia de extraños se puede comportar de una manera desconfiada.
Además, se mantiene alerta de los ruidos externos o alrededor de la vivienda, lo cual puede convertirlo en un ejemplar muy ladrador en especial si la casa está ubicada en la ciudad. Esta raza se reconoce por estar llena de energía y por lo tanto hay que brindarle como mínimo espacio donde pueda correr, jugar y ejercitarse o proporcionarle en su defecto tres paseos al día con los que pueda cubrir sus necesidades.
Por otra parte hay que estimular su agilidad mental, lo cual además le va a mantener alerta y activo ante cualquier reto que se le presente. Este es un perro de raza muy activo y con necesidades de aprender cosas nuevas para no caer en el aburrimiento, evita esta situación con juegos de habilidad mental y retos continuos y veras lo bien que responden.
Cuidados
Más allá de las enfermedades que son propias de los perros con extremidades cortas y de esta forma alargada, se trata de una raza bastante sana sin historial de patologías hereditarias. Las enfermedades más comunes que pueden aquejar a estos ejemplares son:
- Dolencias en la espalda, de carácter muscular y óseo.
- Displasia de cadera.
Lo ideal para mantenerlos bien cuidados y sanos es llevarlos periódicamente a la consulta veterinaria, bien para su control de vacunas como para la detección temprana o prevención de estas u otras enfermedades pudiendo aplicar el tratamiento correspondiente.
El pelaje doble capa del vallhund amerita ciertas atenciones, la capa interna le protege del frio y del calor intenso por lo que no se le debe cortar el pelaje en ninguna de estas estaciones del año. Más bien hay que estar pendiente de la época de muda para cepillarle muy bien el pelo de tal manera de elimines el que está viejo o muerto y así evitas que lleguen algunas enfermedades que le afecten la piel. Además que lucirá bonito y brillante.
Muchos tienden a pensar que para el oficio de pastoreo este es un can bastante bajo, pero quienes no conocen bien la forma de actuar de esta raza se equivocan con juzgarlo solo por su tamaño, ya que compensa muy bien su baja estatura con la inteligencia y habilidad que tiene.
Con el paso de los años también se ha convertido en un can muy bien adaptado a la vida en familia, donde demuestra su inteligencia y fidelidad en todo momento, con grandes oportunidades de desarrollar todo su potencial de inteligencia con los estímulos necesarios.
También necesita de gimnasia y estimulación mental, así que dentro del cuidado diario puedes incluir tanto caminatas como juegos de agilidad, practicar obediencia, pruebas de rastreo y pastoreo si cuentas con el espacio y la experiencia. Las uñas de estos ejemplares se deben recortar cada dos semanas, las orejas deben ser revisadas de forma periódica y en especial cuando tiene actividades al aire libre de ser necesario hay que limpiarlas. Los dientes hay que limpiárselos a diario.